Por: Marcelo Vidal
ENTREVISTA A STEFANIE WOLFF
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“…Toda la vida enmarcada. Justo ahí.”
Una frase que quizás sea la llave para comprender la trama del ensayo fotográfico contenido bajo el nombre ¨Heimat¨.
El libro es hermoso, la impresión exquisita, el contenido una llave a la intimidad de Stefanie Wolf.
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Lunes 13 de junio de 2022.
La nieve aún no ha llegado a Neuquén.
En su departamento, Stefanie alista los últimos detalles para subirse al avión que la llevará a Buenos Aires a presentar su ópera prima.
La presentación será el 16 de junio, el libro formará parte de una muestra colectiva de fotógrafos seleccionados por La Luminosa Editorial.
El lugar será la Librería del Fondo de Cultura Económica, en Costa Rica 4568.
Antes de que parta le envío unos mensajes vía whatsapp para convenir esta entrevista.
Ella responde:
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Heimat, enie intime Verortung es el título completo de su libro y la traducción sería “Hogar, una ubicación íntima”. Se trata de una exploración al pasado de Stefanie. La estética fotográfica envuelve cierto misterio, aparecen velos de manto blanco que envuelven un lago quizás europeo. Es que la trama que desarrolla el libro tiene su origen allí. La obra de Stefanie dialoga con recuerdos familiares a través de textos que entrelazan una historia de guerra, de partidas, de nacimiento y de separación. Es difícil definir si estamos frente a un libro de fotografía o una obra más ambiciosa, pero en definitiva es una pieza de arte potente.
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El tiempo sigue corriendo para Stefanie y la muestra es inminente, antes le piden una recopilación audiovisual que sea la apertura del evento.
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Miércoles 22 de junio. La presentación fue un éxito. Stefanie está radiante. El instagram de @laluminosaeditorial relata en fotos cómo fue esa noche mágica. Muchos ya deben tener el libro en sus manos. Deben conocer detalles de la vida de Stefanie como aquel episodio que la lleva a comprarse su primera cámara de fotos. No fue precisamente una situación ideal.
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– ¿Qué descubrió en aquel viaje, con la cámara, esa niña?
Esa primera cámara me marcó para siempre. Fue el instinto de supervivencia. Mirar hacia otra parte. Creo en parte que ese saber viene de otro lugar, de otro plano. Porque fue muy real la conexión con el desplazamiento del miedo al arte.
Cuando empecé a escribir el texto de Heimat, aquel acontecimiento estaba muy cerca. Sin vacilar lo compartí sin comprender su conexión, pero después, después vino la revelación.
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– Para quienes conocemos tu obra o seguimos tus publicaciones desde hace tiempo, el libro muestra un giro estético/conceptual en tu obra o quizás sea una faceta paralela que recién descubrimos en Heimat. Contame un poco sobre eso.
Hacer un giro en pleno movimiento fue otro acto de supervivencia. Y yo me volví a escuchar. Empecé a hacer clínicas de obra que me orientaron muchísimo la mirada y la escucha y obviamente, aposté a la docencia: mi gran amor. Cuando uno se ubica en esa línea de potencia creativa, la fuerza del mar interior no se detiene más. Y yo hace rato estoy navegando en aguas profundas.
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– El material escrito del libro y el visual se entrelazan en una sola obra, pero tu área de trabajo es la fotografía, ¿cómo fue llegar a la escritura?
Ufff, un laburo tremendo. Porque lo narrativo implica la palabra, pero no la palabra que explique, sino la palabra que acompañe, que oriente, que susurre secretos. Flor Blanco me acompañó en la edición del material, Edu Carrera me acompañó en la escritura. Fue un proceso muy extenso y difícil. Porque hay que transformar lo críptico en una historia tangible sin perder la poética fotográfica, pero encontrando el tono. Es ir y venir y abrirte al relato. Estás al servicio de tu historia. Sin pudor, sin vergüenza. Es un acto de entrega. Estar acompañada de personas hermosas y profesionales fue la mejor decisión. Esto no se puede hacer solo. Para lograr la belleza de ser un relato hermoso, fuerte y potente, alguien debe tomarte de la mano y acompañarte un rato en el hacer. Pienso que las imágenes son bellas porque las palabras liberan algo de ahí que no es visual Y me gusta enseñar desde ahí.
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– Todo este trabajo intenso, su resultado sumado a la experiencia de mostrarlo, ¿qué ha devuelto?
Una mujer frágil y valiente. Una docente con una mirada sesgada para la creación autoral y una artista visual exploradora. Claramente no soy la misma persona que antes de Heimat. Me liberé de muchas cargas. Experimentar el ensayo utilizando el álbum familiar me despertó de una manera muy luminosa. La creación es un asunto espiritual 🙌🏼 y desde ese lugar, el proceso se vuelve mágico.
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La conformación familiar con un padre ausente es mucho más común de lo que quizás cualquiera podría suponer. Heimat es un paseo por los sentimientos de aquellas personas que han atravesado esa infancia, adolescencia o adultez. Este punto me conecta con Stefanie y con Heimat. Este libro es una bitácora, es una obra de arte que posee postales y versos que abren los ojos del alma y permiten navegar junto a esa ausencia un día cualquiera.
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Marcelo Vidal / @marcelojaviervidal
Trabaja como desarrollador web en el Centro de Producción Formación y Desarrollo en el IUPA donde también es docente de Herramientas Digitales. Estudió sin éxito Comunicación Social en la Universidad Nacional del Comahue y Diseño Gráfico en la Universidad Nacional de Río Negro, tuvo mejor destino la Diplomatura en Programación Web que finalizó en IUPA en el 2021.
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